CAPITULO 12
ABANDONADOS BAJO LA LLUVIA. 12
Derrota es la acción
y efecto de derrotar o ser derrotado. El verbo derrotar, por su parte, hace referencia a vencer
o ganar en un enfrentamiento, a romper o destrozar, todos hemos sido derrotados
en nuestras vidas, humillados, desechos, tirados, vencidos, hemos perdido
nuestro horizonte, nuestra esperanza, caminando hacia el abismo, sin fuerzas
para luchar, sin ánimos para seguir, empapados bajo la lluvia de la
desesperación, succionados por el hoyo negro de la amargura, consumidos por la
oscuridad, mirando al cielo en espera de una respuestas, creyendo que nuestros
problemas son demasiado grandes, invencibles, como un monstruo tan grande que
no podemos derrotar y nosotros somos un pequeño ser vivo, sin fuerzas para
seguir, sin ánimos de luchar, pero ¿dejaremos que esa inmensa tormenta nos
aplaste? O en cambio ¿seremos los propios héroes de nuestra historia?
LEOPOLIS
10:10 PM – 11/4/2024 – DISTRITO DOS – GRAN
HOSPITAL CENTRAL - GOBIERNO IMPERIAL DEL SUR
-
¿Así que todos están bien? Eso es bueno, es
una gran noticia...
-
¿Con que es verdad? Te has vuelto blando Sr.
Presidente
-
Te llamo luego – colgó la llamada el
Presidente Alexander, quien se encontraba sentado en la cama del hospital,
recuperándose de su fatídico día, movía su brazo mientras apretaba su puño
lleno de impotencia al no lograr su cometido – ¿hace cuánto llegaste, Kim Sun
Red?
-
Llegue en la tarde, los guardias no dejaban
que subir a la capital hasta que todos estos inconvenientes fueran aclarados –
contesto Kim, una mujer de unos 27 años, máxima estratega del imperio Xio Sun
Red, además de ser la tercera hija del emperador Yao Sun Red, debido a los
lazos de amistad entre el Imperio Xio Sun Red y el Gobierno Imperial del Sur,
Kim ha estado trabajando de las estrategias publicitarias de Leopolis, además
de alimentar la paranoia de Alexander, ella toma asiento en una de las sillas
que está cerca de la cama del presidente, se tira en el sofá y empieza a
estirar su larga cabellera negra, tan negra como la noche más oscura – el
imperio está molesto contigo Alexander
-
Le dan demasiada importancia Kim, no es
alguien a quien temer – dijo Alexander mientras presionaba su puño con mucha
ira y levantaba la miraba hacia la ciudad
-
Siempre me ha gustado Leopolis – comento Kim
– sus grandes muros que imponen respeto a las demás clases sociales – se
levanta del sofá y camina hacia la ventana que está enfrente – esta es la
ciudad perfecta Alexander, nadie ha logrado algo así, leí una historia de los
países antiguos que estaban en esta región, su ideal era la igualdad, pensaban
que todos sus problemas se resolverían si todos eran iguales, que gran
estupidez, al final, como siempre los políticos se volvieron corruptos y al
final todos terminaron en la pobreza, luchando por migajas de comida, ni su
gran campaña mediática los salvo del fracaso
-
¡VAYA! No te guardas nada – dijo Alexander
levantándose – el nombre La Bestia a veces te queda corto con todo lo que has
logrado, si no hubiese sido por tus consejos nuestros enemigos nos hubiesen
aplastado, ya estoy muy viejo para notar el peligro
-
No te pongas sentimental Alexander, solo
tenemos que aumentar la campaña publicitaria, crear un gran evento musical,
contratar a músicos para que digan cosas buenas acerca del imperio y la gente
olvidara todo este desastre – decía Kim mientras jugueteaba con su cabello
-
¿Porque no mejor hablas con Yao? – refuto
Alexander – dile que me preste parte de su ejército, invadiré el distrito 3 y
acabare con la escoria de la Legión, será mucha más económico para ambos
-
El imperio Xio Sun Red tiene sus propios
problemas – dijo Kim de forma seria – no podemos prestarte el ejercito
-
Tenemos un acuerdo entre naciones Kim – dijo
el presidente de forma amenazante
-
Es mejor que se siente presidente – Kim no
dejaba de caminar por la sala, pisando fuerte con sus botas miliares, luciendo
un pantalón vino tinto típico del ejercito de Xio Sun Red y una blusa sin
mangas gris, llena de pulseras en ambos brazos y tatuajes en ambas mejillas de
su cara, sus tatuajes eran soles rojos con bordes negros, un tatuaje común en
la familia del imperio, además de usar mucho delineador negro.
-
¿Qué pasa Kim? ¿Porque estas nerviosa?
¡HABLA!
-
La cuestión Alexander, es que nosotros…
también tenemos a nuestro propio problema
-
Nadie me ha informado nada ¿puedo ayudarlos
Kim?
-
De hecho tenemos un mismo problema – Kim saca
un expediente de su bolso y lo tira al lado del presidente.
-
Es imposible – dice el presidente al observar
el expediente
-
Así es Sr. Presidente, tanto a su país como a
el mío lo ataca el mismo mal, un anarquista dispuesto a cambiar con todo el
sistema
-
¿Cómo se hace llamar?
-
Muchos lo llaman Dragón Sun Red, pero él se
hace llamar… Káiser
LEOPOLIS 7:58 AM – 12/4/2024 –
DISTRITO TRES – EX CUARTEL GENERAL DE LA
LEGION DEL FENIX - GOBIERNO IMPERIAL DEL SUR
La lluvia no se detiene, el sonido de una
pala al chocar contra el suelo irrumpe en el llanto de cientos de personas, lo
que queda de la Legión se encuentra reunida en la parte trasera de los
cuarteles, reunidos entre llantos y gritos, entre dolor y angustia, entre
lágrimas y lluvia, la lluvia ha cesado, la brisa arrastra las pequeñas gotas de
agua por el rostro de los presentes, ya son las 8:00 am en la colina llena de
árboles, algunos son más viejos que otros, unos tienen siglos, otros décadas y
la mayoría solo años, esta colina represente el cementerio de la Legión, cuatro
soldados de la Legión entran en escena, vestidos con un traje ceremonial, ropa
militar de color vinotinto con detalles negros, una gran capa negra que cubría
su cuello y caía desde su hombro derecho hasta su rodilla, cada una portaba su máscara
personal, cada una sostenía el extremo de una camilla que cubría un cuerpo en
una sábana blanca mientras que al fondo suena el intro de una vieja canción de
una banda llamada Architects, la canción se llama learn to live, la banda
orquestal toca esta canción, alguno de los presentes la tararea, mientras que
los cuatro soldados se detienen al frente de una fosa, allí depositan el cuerpo
sin vida de Madelin, los cuatro soldados se retiran, estos soldados eran, Anarquía,
León, Cobra y Cocodrilo, al frente de ellos se encuentra Káiser, este se acerca
a Madelin, le quita la sabana que cubría su cuerpo, sostiene sus manos por unos
segundos, le susurra unas últimas palabras, coloca entre sus manos una semilla
de su árbol favorito, el araguaney, Káiser se levanta uno de los soldados le
acerca una pala, él toma la pala y la clava contra el suelo con gran ira,
mientras saca la pala del suelo llena de tierra siente como su corazón se
desgarra con cada golpe, siente como la tristeza tomara su pecho y rasgara cada
parte de su ser, sentía como cada parte del moría junto con Madelin, las
lágrimas no salían de sus ojos pero inundaban su corazón, cada recuerdo feliz
que había pasado con ella era enterrado bajo la fría tierra, ella era todo lo
que el tenia y al final ella también se había ido, Káiser jamás quiso esto,
cuestionaba su misión, pensaba que todo el dolor que sufría él y los que lo
rodeaban era injusto, nadie se lo merecía, el no pidió vivir en un mundo así,
pero ese fue el mundo que le dejaron sus antepasados. Al terminar de enterrar a
Madelin entrego la pala a uno de los soldados, volteo a observar a los soldados
de la Legión, trataba de decir algo pero el nudo en su garganta se lo impedía, así
que respiró profundo y dijo “Ellos creen que hemos sido derrotados, ellos creen
que nos han vencidos, pero jamás seremos destruidos mientras seamos puros, solo
hasta el día en que nuestros ideales sean corrompidos, hasta que decidamos
darles la espalda a aquellos a quienes juramos proteger, solo hasta el día en
que abandonemos el camino de la justicia, solo hasta ese día nuestros enemigos
podrán decir que nos han vencido, LEVANTEN SU ROSTRO,HOY ES UN NUEVO DIA POR EL
CUAL LUCHAR, NO DEJEMOS QUE LA MUERTE DE NUESTROS AMIGOS, DE NUESTROS HERMANOS
NO SIGNIFIQUEN NADA, LAS VIDAS QUE AQUÍ SE ENCUENTRAN ENTERRADAS, LAS VIDAS QUE
AQUÍ HAN FLORECIDO SON TAN IMPORTANTES COMO LAS NUESTRAS Y ESE SENTIMIENTO NOS
ACOMPAÑARA HASTA NUESTRA MUERTE”
Pero aunque esas palabras llenaron de
entusiasmo sus cuerpos aún continuaban tristes, muchos de sus compañeros han
muerto, otros han sido encarcelados, el mañana ya no se veía tan claro como al
principio, su camino se había vuelto turbulento, lleno de dudas e
inseguridades, ni siquiera Anarquía se mostraba convencida de las palabras de Káiser,
ella solo se hundió en su mundo y cedió a las lágrimas, Káiser se acercó a ella
y las abrazo fuerte y comenzó a cantar esa canción que la banda orquestal
repetía una y otra vez como era la costumbre en las ceremonias de la Legión, la
parte que el comenzó a cantar se traduce así:
Levántate de nuevo tú
mismo
Y aprende a vivir
Deja de preocuparte
Deja de pensar
El césped es más
verde del otro lado
No renuncies a la
vida
Nunca retrocedas
Hazlo por ti
No necesitas a nadie
Para llegar a donde
mereces
León quien se encontraba a un lado de
ellos también comenzó a cantar y junto a él también se unieron muchos más, a
pesar de las palabras de Káiser lo que motivo a aquellos soldados aquel día fue
unir sus voces en una sola, porque podían recordar los momentos que
compartieron junto con sus compañeros que ya no estaban, al final terminaron
cantando todos juntos el coro que decía:
Nosotros somos los que quedamos afuera, en la
lluvia
Vuelve mañana y estaremos aquí de nuevo
Luchamos debajo de la lluvia
Sólo para vivir un día más
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